El Alfatercio, sabe que que el pensamiento es difícil de controlar pero que no le queda otro remedio que hacerlo porque si no el pensamiento le controlará a él. También sabe que en los libros se aprende mucho pero que es más didactica la sonrisa de un niño, el perfume de una flor o la calidez de una caricia. Vivir es andar hacia nosotros y hacia los demás y tener experiencias nuevas cada día que se nos regala.